Es un nombre breve, pero con un extenso significado. Más que una palabra, SANY encierra un complejo concepto que se denomina tres primeras clases, lo que se expresa gráficamente en su logo, una especie de estrella de tres puntas. “Somos una multinacional con 32 filiales, 2 corporaciones y 52.000 empleados globales. No somos una marca china, nos percibimos como una compañía de clase mundial“ explica a AméricaEconomía Xu Ming, presidente para Latinoamérica de la firma. La firma china asegura ser hoy el tercer fabricante de maquinaria pesada a nivel global y el segundo más importante del mundo en maquinaria de construcción, situándose como líder global en la venta de excavadoras desde 2020. “En esa área, superó a Caterpillar, con una venta de 98.775 unidades, y hoy es número uno en bombas de concreto, con más del 45% del mercado a nivel mundial y también en mezcladoras (mixers), donde anualmente vende más de 20.000 unidades”, detalla en perfecto castellano Ming, quien estuvo recientemente en Chile para presentar la estrategia de crecimiento de la marca en la región. 

De todos modos, la competencia en el sector es fuerte, con presencia de marcas globales de tradición como CHN Industrial, Deere, Hitachi, Komatsu, Liebherr, Volvo y XCMG, además de la omnipresente Caterpillar. Pero SANY podría ser el nuevo actor desafiante de ese segmento, debido al rápido crecimiento que ha mostrado, pasando de US$ 80 millones en ventas en 2011, a US$ 27.000 millones de facturación para 2021. 

“En términos absolutos, SANY ha crecido 338 veces en 20 años. Y para 2025 esperamos facturar US$ 45.000 millones a nivel mundial, cifra que llegará a US$ 70.000 millones para 2030”, asegura sin dudar el ejecutivo chino, que hoy reside en Atlanta y verifica el desempeño de la marca a nivel continental. 

La firma asegura estar abarcando áreas diferentes que los players establecidos con distintas áreas, desde construcción, donde produce bombas de hormigón, pavimentadoras, rodillos y motoniveladoras, hasta maquinaria portuaria (apiladores de alcance, manipuladores de contenedores vacíos, grúas de barco a tierra, grúas pórtico montadas sobre rieles, grúas pórtico con neumáticos de caucho) y todo el espectro de grúas: móviles, montadas en camiones, grúas para terrenos difíciles y grúas todo terreno. Además, cuenta con las divisiones Sany Electric, a cargo de los productos de maquinaria de energía eólica, Sany Heavy Machinery, Sany Heavy Equipment, que produce maquinaria para la minería del carbón y Sany Science and Technology, que produce grúas sobre orugas. “Caterpillar y Komatsu tienen menos líneas de productos. 

Sin embargo, ellos tienen otras líneas que SANY no tiene, como generadoras, energía, y todo el sector minero, donde Komatsu es muy completo y fuerte”, concede Ming. DESDE CHANGSHA HASTA EL WEF Formada en 1986 en la ciudad de Changsha en la provincia de Hunan, la firma comenzó de la mano de Lian Wengen con una inversión de apenas 60.000 yuanes (US$ 9.200) y hoy lista en las bolsas de Shanghai, con sus divisiones de maquinaria de construcción y de equipamiento. En tanto que sus áreas de equipos mineros y SANY portuaria cotizan en Hong Kong. El desarrollo de la marca ha sido meteórico. 

En 1991 comenzó a crecer al 50% anual con sus grúas, impulsada por el rápido crecimiento de China en el sector construcción. Y en 1994 inició la diversificación hacia otras áreas de maquinaria. Hacia 2006 empezó su internacionalización y en 2012 concretó la adquisición de dos firmas alemanas: Putzmeister para ingresar a la construcción de bombas de concreto, e Intermix para iniciar la producción de mezcladoras, con lo que pudo ampliar su espectro de maquinarias e ingresar al exigente mercado europeo con la apertura de una planta en Alemania. 

En julio de 2011, además, se transformó en la primera compañía china en ingresar a la lista Forbes 500, posicionándose en el lugar 468, y en noviembre del año pasado la firma fue destacada por el Foro Mundial Económico (WEF, por sus siglas en inglés), como la primera ‘fábrica faro’ en maquinarias de construcción del mundo, por su fábrica de equipos de perforación en Beijing. De acuerdo con la entidad basada en Davos, estas plantas representan las tecnologías más avanzadas en sus sectores a nivel mundial. “Cada cinco minutos, SANY fabrica tres excavadores. De cada seis excavadoras en todo el mundo, una fue hecha por nosotros”, recalca Xu Ming.

 Esa diversificación permite a la compañía seguir creciendo globalmente, aunque sus áreas muestren un desempeño dispar, de acuerdo con los vaivenes de distintas industrias. “SANY no es solo excavadora, no es solo bombas, grúas, o maquinaria portuaria. Estamos en todos los sectores de maquinarias, por eso, si es que un sector no anda bien, otros lo acompañan. 

Hay un equilibrio muy lógico en cuanto a la economía mundial, no todos los sectores andan bien todos los años, pero por tener un portafolio tan amplio, SANY tiene buenos clientes en distintos rubros”, enfatiza Ming. El ejecutivo subraya que, especialmente por la pandemia y las disrupciones que ha provocado, “los clientes tienen una mayor necesidad de equipos con mejor relación precio calidad”, que es otra de las ventajas que ostenta la marca: “calidad mundial a precio chino”, dice Ming. CRECIMIENTO LATINOAMERICANO Aunque es menos visible que sectores como retail, e-commerce o telecomunicaciones, de acuerdo con un análisis de la firma de investigación de mercados Allied Market Research, de febrero de este año, el tamaño del mercado global de maquinaria pesada de construcción se valoró en US$ 176.000 millones y se espera que alcance los U$ 273.000 millones para el 2030. Y es que el área de maquinaria no solo es relevante en sí misma por los volúmenes globales que mueve, sino que además es un indicador concreto y tangible de la inversión de diversos sectores industriales de un país, medido a través de la importación de estos bienes de capital, explican desde la Sociedad de Fomento Fabril (SOFOFA), de Chile. 

Esta entidad elabora mensualmente un índice de inversión en maquinaria, en conjunto con la Universidad Católica y a partir de información del Servicio Nacional de Aduanas. Luego, sus datos permiten estimar el comportamiento de la economía local. Así, el índice permite entregar señales sobre las condiciones económicas que enfrentan las empresas de un país como Chile y posibilita proyectar sus expectativas para el futuro, las que se ven afectadas por diversos factores locales e internacionales. Como era esperable, la pandemia de COVID-19 afectó al mercado local y global de maquinaria pesada, explica el reporte de Allied Market Research, ya que las medidas de confinamiento afectaron tanto la venta de estos equipos como su fabricación y envíos. De modo que la reapertura de las fábricas de maquinaria pesada e industrial ha significado una recuperación del mercado que se espera pueda consolidarse durante 2022. 

A nivel mundial, tanto China, como India y los Estados Unidos están desarrollando proyectos estatales y alianzas público-privadas para estimular la construcción de sistemas de infraestructura pública, lo que ayuda al crecimiento de este segmento del mercado. Ahí destaca el plan de un billón de dólares de la administración Biden para infraestructura. En la primera economía mundial, la firma SANY tiene desde 2006 una planta de 272 acres, por un valor de US$ 60 millones en Atlanta, Georgia, donde emplea a más de 150 operarios locales. Además, ahí se encuentran sus cuarteles generales para Latinoamérica. Hoy la firma tiene presencia en todo el continente. Desde Brasil, donde instaló su primera planta física, pasando por México y Colombia, tres países donde tiene operación directa. En otras naciones como Perú, Chile, Argentina y Uruguay es mediante distribuidores, como el caso chileno, en el que se unieron a la distribuidora Andes Motor, firma perteneciente al grupo Kaufman, que, además, tiene la representación de las marcas Foton, Maxus, Agrale, Iveco y Karry. Su crecimiento en la región latinoamericana ha sido meteórico. “En 2021 crecimos 227% en la región - respecto de 2020 – y este año el primer trimestre seguimos creciendo en 229% comparado con el año pasado en la misma fecha”, dice sonriente. Aunque no detalla las cifras de los otros países del continente, Ming asegura que en los grandes mercados como Argentina, Brasil, México y Colombia SANY mantiene un ritmo de crecimiento muy similar. “SANY está entre los tres primeros lugares del ranking en los segmentos en que participa en el país”, dice Luis Izquierdo, gerente general de Andes Motor. 

El line-up de la marca en ese país integra motoniveladoras, rodillos compactadores y cargadores frontales, así como maquinarias a pedido. Pronto iniciarán la importación de equipamiento para minería. 5G Y NUEVA ENERGÍA Al proyectar el futuro de la maquinaria en el globo, Allied Market Research indica que los principales actores del sector se están enfocando en fabricar maquinaria inteligente, eficiente en uso de combustibles y además interconectada. En esa línea, la firma china SANY lleva algunos años desarrollando maquinaria que funciona sobre la base de electricidad y nuevos combustibles, como el hidrógeno. Y desde mayo de este año la firma ha anunciado que no producirá más equipos con motores diésel. “Los vehículos eléctricos están recibiendo certificación en Europa en segunda mitad año podría llegar a Chile por ser el país más desarrollado en la región y con ansias de probar nuevas tecnologías para una mejor protección ambiental”, adelanta Ming. “

En ese sentido, creo que Chile sería el primer país en recibir estos equipos eléctricos. De hecho, el grupo Holci, de cemento y concreto está en plena conversación con SANY para traer y probar estos equipos eléctricos”, agrega. La firma tiene una unidad de I+D en China que invierte cada año US$ 1.000 millones para el desarrollo de nuevos productos y tecnologías. “Probamos cada nuevo desarrollo al menos dos años localmente antes de exportarlo y popularizar la tecnología”, detalla Ming, quien explica que gracias a los avances en 5G también están en pleno desarrollo de vehículos de conducción autónoma y digital twins. Una vez que esté operativo 5G en países latinoamericanos y que la firma complete las pruebas locales de dos años, “esas innovaciones ya podrían ser aplicadas acá en la región por los clientes que tienen una mayor aspiración tecnológica”, finaliza Ming.